Solo queda encomendarse a todos los santos...

Esta es la primera entrada en el blog sobre carreras universitarias, lo que parece un tema interesante dado lo que se nos viene encima. Hay miles y miles, y todas muy variadas, por lo que debería de parecer difícil saber por dónde empezar, pero yo lo tengo claro: no creo que haya mejor comienzo que aquel que ansío yo: Medicina.

Esto es lo que toca hacer para entrar...

He oído a tanta gente hablar sobre esta carrera y querer ingresar en esta facultad que deberíamos crear asociaciones de futuros estudiantes de Medicina (¿proyecto 1º de Bachillerato?). Somos demasiados, aunque creo que con razón. Si eres una persona con ganas de ayudar, con paciencia, pulso, un gran sentido de la responsabilidad y capaz de hacer de tripas corazón, este es tu sitio.

Sin embargo, esto no parece suficiente. Las notas de corte rondan el 12'5 sobre 14, siendo de las más altas debido tanto a la exigencia de la profesión como por la gran solicitud.

La carrera básica son 6 años, y debe de ser cursada por todas las personas que quieran especializarse. Durante este período se adquieren conocimientos básicos de Anatomía, Histología, Embriología, Historia de la Medicina y demás. Además, se comienzan a hacer prácticas en hospital a partir del 3º año de carrera, donde solo te dedicas a mirar. En los años siguientes aumentan exponencialmente estas visitas al hospital, así como tu participación en el proceso, llegando a ser sexto prácticamente en el hospital.

Luego llega el momento que teme todo estudiante de Medicina: el examen MIR. Es una especie de concurso-oposición convocado una vez al año en el que el expediente pondera 10% y el examen el 90%. Son 225 preguntas de tipo test y 10 preguntas de reserva, haciendo un total de 235 preguntas.

Cuando las notas son publicadas por el Ministerio de Sanidad, la persona con la mayor nota de España escoge plaza en la especialidad que decida y en la ciudad que desee, la segunda persona igual, salvo por la plaza ocupada por el primero, y así sucesivamente.

Todos aquellos que consiguen acceden a una especialidad lo hacen en régimen de residencia, salvo Hidrología médica, Medicina de la Educación Física y el Deporte, y Medicina Legal y Forense que lo hacen en régimen de alumnado.

Las especialidades tienen distinta duración, dependiendo de los conocimientos y la exigencia de cada una. Aquí os dejo una lista con cada una de ellas y los años de formación:

Alergología	4
Análisis clínicos	4
Anatomía patológica	4
Anestesiología y reanimación	4
Angiología y cirugía vascular	5
Bioquímica clínica	4
Cardiología	5
Cirugía cardiovascular	5
Cirugía general y del aparato digestivo	5
Cirugía oral y maxilofacial	5
Cirugía ortopédica y traumatología	5
Cirugía pediátrica	5
Cirugía plástica, estética y reparadora	5
Cirugía torácica	5
Dermatología médico-quirúrgica y venereología	4
Endocrinología y nutrición	4
Farmacología clínica	4
Gastroenterología (o Aparato digestivo)	4
Geriatría	4
Hematología y hemoterapia	4
Hidrología médica	2
Inmunología	4
Medicina de la educación física y el deporte	3
Medicina del trabajo	4
Medicina familiar y comunitaria	4
Medicina física y rehabilitación	4
Medicina intensiva	5
Medicina interna	5
Medicina legal y forense	3
Medicina nuclear	4
Medicina preventiva y salud pública	4
Microbiología y parasitología	4
Nefrología	4
Neumología	4
Neurocirugía	5
Neurofisiología Clínica	4
Neurología	4
Obstetricia y ginecología	4
Oftalmología	4
Oncología médica	5
Oncología radioterápica	4
Otorrinolaringología	4
Pediatría y sus áreas	4
Psiquiatría	4
Radiodiagnóstico	4
Reumatología	4
Urología	5

Después de esto, al estudiante solo le queda echarse a la aventura de la Medicina, tener mucha paciencia con los pacientes e intentar no confundirse a la hora de amputar una pierna :)

Fuente de información #1